Fue en el marco de la última actividad del ciclo de seminarios abiertos que realizó durante el Instituto de Investigación en Educación Superior (IIES/ADUBA/UBA) a lo largo del 2020. El seminario titulado “Del abordaje de las violencias sexistas a la transversalización de la perspectiva de género” estuvo a cargo de la Dra. Florencia Rovetto, investigadora adjunta del Conicet, doctora en periodismo y ciencias de la comunicación de la Universidad de Barcelona y titular del Área de Género y Sexualidades de la Universidad Nacional de Rosario.
Durante el encuentro, al que asistieron docentes e investigadores universitarios, la especialista en género abordó cuestiones vinculadas a violencias de género y cómo el debate en relación a ello ha permitido generar políticas públicas vinculadas a este abordaje.
“Las violencias machistas son una expresión de un conjunto de desigualdades sexo genéricas que atraviesan la sociedad en su conjunto y se expresan también en la universidad y el sistema educativo de muy diversas maneras”, e hizo hincapié en la importancia de un Estado que mediante la generación de políticas públicas permita erradicar violencias sexistas, explicó.
En tanto, sobre el rol de las universidades consideró que son piedra angular en la construcción de pensamiento crítico y compromiso social para abordar problemáticas como la violencia de género, y resaltó la necesidad de pensar cómo las violencias sexistas nos atraviesan a todos y todas, desde la forma en que históricamente se ha estructurado la gestión institucional y las relaciones de poder hasta la manera en que se ha construido el conocimiento desde una mirada androcéntrica, lo que obstaculiza la capacidad de comprensión más integral del saber y del ámbito académico en general.
En este sentido, la investigadora de CONICET comentó la importancia de la aplicación de una transversalización de la perspectiva de género, y de integrar las cuestiones de género en la totalidad de los programas sociales. “Para transversalizar, hay que visibilizar, cuestionar, generar instancias de reflexión como propone la Ley Micaela y también pensando políticas y proyectos que se traduzcan en transformaciones concretas a nivel institucional”.